Soy
la que se viste
con todos los paisajes
(para ti).
La
que dibujas a tu antojo
en
las sombras
y en el azul de un “no me olvides”.
La
que deshoja pétalos de letras
cuando
la tarde llora,
y
busca cascabeles en la sangre
que
alborotan la pasión
entre
las sábanas.
Soy
la que se viste
con la seda del capullo
y encuentra la caricia
que
desciende de tus manos.
Soy
la dueña de tu navegar secreto.
La que descansa
en tu aroma viril,
el
dulce temblor de cada sueño.